Se miran mutuamente y no puedes pensar en nada más que en ella y deseas que al final ella caiga rendida a tus pies. Ella finalmente muestra signos y entonces comienza el baile.
Te despertaste temprano ese día porque tus nervios no te dejaron dormir bien. Quieres que este día sea especial y te has arreglado para eso. Quieres lucir limpio, impecable. Te has comprado una ropa que aunque no es cara te queda muy bien, te has asegurado de que te queda bien. No hay más nada que decir, te queda perfecta, el perfume también.
La primera cita con ella es mágica. La llevas a un buen restaurante, luego a ver una película que hacía tiempo querías ver y que sabes que a ella también le gusta. Después de salir del cine te detienes para comprarle un cono de helado y a pesar de estar casi llenos con las palomitas de maíz (porque ambos estaban muy nerviosos y comieron muchas en el cine) ella hace lo posible por comerse el cono de helado. Luego viene un momento un poco incómodo en el que no sabes si darle un beso de buenas noches, si invitarla a una próxima cita o si entrar con ella a su casa, etc.
Después de pensar y pensar tanto durante los últimos minutos de la cita, la madre naturaleza se hace cargo de la situación. No sabes cómo, pero te llenaste de valor y le diste un beso suave, respetuoso y prometes llamarla. ¡Todo parece tan mágico! Pero es solo un baile, el baile de la seducción.
¿Qué significa esto? Normalmente un baile es una serie de movimientos que siguen un patrón rítmico que coincide con la música y que expresa cómo te sientes con ella. Pero nada en el baile se ha concebido para que sea permanente, o eterno.
No es que quieras colocar tu vida sentimental en un patrón. El problema es que nuestra respuesta hormonal a la atracción física inicial crea la música y el baile pero nuestras mentes y nuestros corazones no tienen nada que ver con esto.
Salir con una persona tiene generalmente el propósito de amarla y compartir toda la vida con ella. Si eres de los hombres cuya rutina amorosa es como un baile, ¿cómo puedes tener tiempo de determinar si esa chica con la que acabas de salir y que no volverás a llamar es la indicada para ti o no? Quizás te sientas bien al principio pero al final, no.
El baile es engañoso y todo el esfuerzo hecho por ambos es falso. Si tuvieras una relación de un año con una chica y ella te pide ir al cine para ver una película, ¿dejarías de trabajar por el día para preparar una salida perfecta con ella por la noche? Después de una relación de más de un año, ¿te esforzarías tanto para hacer una cita perfecta o simplemente llegarías del trabajo como todos los días?
¡Quédate conmigo para que conozcas más acerca del baile de la seducción y para juntos explorar nuevas formas de encontrar a la mujer de tus sueños