Has llegado a la conclusión de que tu relación marcha hacia un callejón sin salida. Ha llegado el momento de decidir si continuarás poniendo todo tu esfuerzo en la relación para hacer que funcione o si simplemente renunciarás a todo.
¿Qué opción escoger? Si escoges luchar para que funcione necesitas tener razones que justifiquen que esta ha sido la mejor opción. Si por el contrario decides terminar, también necesitarás tener tus razones.
1. No te trataron de la mejor forma. Esto se traduce en que te hayan humillado repetidamente, se hayan burlado de ti, subestimado… o que incluso te hayan hecho algo peor. Si tu pareja abusó de ti, entonces no hay razones para quedarse. El abuso no necesariamente tiene que dejar marcas físicas en tu cuerpo. El maltrato verbal, emocional, mental y psicológico puede ser igualmente destructivo. Si a tu pareja no le importa esto y continua poniéndote en esta situación debes dejarle… inmediatamente.
2. Tu ojos se han abierto para descubrir quién es realmente tu pareja y ya no es encantador. Ahora que ya conoces mucho mejor a tu pareja, has descubierto cosas que no resultan atractivas ni tolerables. Cuando las personas se encuentran por primera vez, generalmente muestran su mejor cara. Pero, en la medida en que el tiempo pasa, bajan la guardia y su “verdadero yo” aparece. Muchas veces ese verdadero yo no es muy agradable.
3. Tú has madurado: tu pareja no. Esto es particularmente frecuente en los jóvenes. La mayoría de las personas dejan atrás su comportamiento de adolescente y toman responsabilidades mayores en la sociedad. Por otra parte otros se sienten bien en quedarse con sus viejas costumbres. Si sientes que que ya estás preparado(a) para seguir adelante y experimentar lo que la vida tiene para ofrecer, no puedes permitir que tu pareja te estanque porque quiera ser para siempre una personita de 10 años.
4. Evalúa el tiempo en que no están juntos. ¿Te has dado cuenta de que el tiempo que pasas sin tu pareja es fascinante e incluso más aún que cuando están juntos? Esto significa que has comenzado a distanciarte. Esto no tiene que ser necesariamente por culpa de nadie. Simplemente podría ser que la relación ha llegado a su límite.
5. Te has dado cuenta de que están funcionando más como amigos que como pareja. En este punto mejor ser honesto(a) contigo mismo(a) Si te has dado cuenta de que has comenzado a ver a tu pareja sólo como amigos, es tiempo de que se lo hagas saber. Al menos serás capaz de salvar una buena amistad que perder las dos cosas a la vez.
Aprende sobre ti mismo(a)… ¿qué es lo que te hace sentir así? ¿Son las emociones destructivas la causa de los problemas que estás experimentando con tu pareja? Si es así, entonces necesitas tomar las riendas de lo que te estás diciendo a ti mismo(a). ¿Qué crees tú?
Por casi 10 años SeduceMujeres ha investigado y ha descubierto los principios que te ayudarán a descubrir las causas que han provocado una crisis en tu relación de pareja.