Bien, ¿deseas enamorarte y tener pareja? A lo mejor ya tienes la madurez suficiente y te está yendo bien en la actividad laboral que elegiste. Muchos de tus amigos están casados o comprometidos.
Ya estás un tanto cansado de la soltería y la vida en solitario. Por tanto, ya debes estar listo, ¿verdad?
No necesariamente.
Así que, ¿qué significa estar listo para una relación? Es exactamente lo que dice. Estás capaz de lidiar apropiadamente con los compromisos y desafíos que una relación saludable e íntima requiere.
¿Cómo saber si ya estás listo? ¿Qué características necesitas tener o adquirir para estar listo para el verdadero amor?
Existen 4 áreas primarias que debes explorar para evaluar tu estado presente de preparación.
1. Haz inventario de traumas pasado y problemas acuciantes
Debes revisar mentalmente esto y mirar con honestidad a cuán bien has manejado y resuelto estas situaciones.
A medida trabajes con esto, pregúntate: ¿Está impactando esto de forma negativa mi vida actual?
También explora el hecho que esta situación de pronto se vuelva problemática una vez inicies una relación íntima.
Si crees que hay cosas que no has resuelto de manera adecuada, necesitarás trabajar en esos aspectos. Si no estás seguro, entonces requerirá un análisis más profundo, podrías considerar una terapia con un consejero o participar en terapias de grupo.
Un ejemplo de tales asuntos sería, pero no únicamente limitado a esto; el abuso sexual, físico o emocional en la infancia, el divorcio de los padres, la pérdida de un padre u otro ser querido, o una relación amorosa pasada abusiva o disfuncional.
2. Cómo está tu Conciencia de Ti Mismo y tu Auto-Estima
Si no te conoces a ti mismo y no cuentas con un sentido positivo sobre tu propia persona; una relación íntima puede ser difícil si no imposible de sostener.
Por ejemplo, ¿te conoces lo suficiente como para responder a lo siguiente?
¿Podrías decir cuáles son tus valores más preciados?
¿Sabes qué es lo que puedes y no puedes tolerar en una relación?
¿Tienes una buena idea de tus metas en la vida?
¿Conoces tus propias fortalezas y debilidades?
Ahora, haz una evaluación rápida de tu auto-estima.
¿Cómo te ves a ti mismo?
¿Cómo te ven los demás?
Recuerda como eres actualmente cuando estas:
En el trabajo
Con la familia
Con los amigos
En reuniones con conocidos
Si tus respuestas te dicen que tienes dificultad para aceptar y sentirte a gusto contigo mismo, o si los demás con frecuencia responden con frecuencia en tus interacciones con ellos, entonces ésta es un área en la que debes comenzar a trabajar.
La auto-estima es la base de toda buena relación saludable.
3. Diste Punto Final a tus Relaciones Pasadas
Si no cerraste de manera adecuada cualquiera experiencia traumática o dolorosa con tus relaciones pasadas, corres el riesgo de llevar ese bagaje emocional a tu relación presente o futura a fin de resolver ese o esos asuntos pendientes.
Por tanto, es importante que sepas que has lidiado de manera apropiada con cualquier pérdida o dolor significativo y hayas aprendido de cualquier dinámica disfuncional en la que hayas contribuido.
Si te hallas cayendo seguido en patrones nada saludables con tus pensamientos o comportamientos respecto a los demás; haz un alto, identifica y luego lidia con esos asuntos.
4. Sabes lo que Deseas de una Relación
Entramos en relaciones por muchas razones diferentes y con muchas expectativas distintas. Sabiendo cuáles son las tuyas ayudará a determinar si ésta es la relación correcta para ti.
Muy a menudo escogemos a alguien usando un nivel inconsciente de pensamiento como nuestra primera fuente. Es ahí donde descansan nuestras necesidades más profundas no satisfechas, así como los temores y deseos.
Desafortunadamente, a menudo existe un abismo entre nuestro conscientes e inconsciente que mantiene esta información oculta de nuestro lado pensante más lógico.
Así que es muy importante que examines todos tus sentimientos y necesidades respecto a cualquier relación futura. Mira con honestidad a lo que puedes tolerar y lo que no.
Debes saber qué es lo que deseas y necesitas de una futura pareja para que puedas escoger a la más apropiada para ti.
Ahora, pasa algún tiempo explorando estas cuatro áreas importantes antes de que inicies una relación romántica seria. Al hacer así, contribuirás a contar con la certeza de que tu nueva relación será una saludable y duradera.