Recibí un mensaje de una mujer que dice ser una feminista y no está interesada en lo que tengo que enseñar acerca de crear una relación amorosa para toda la vida con un buen hombre.

No obstante, ella está buscando ayuda en el territorio de las relaciones, lo cual a todas luces indica que las cosas no le están yendo tan bien como a ella le gustaría.

¡Vamos!

Lo que las mujeres feministas no se dan cuenta todavía es que viven sacrificando el tener una buena relación con tal de estar en lo “correcto”.

Y eso se debe a que el feminismo pone a las mujeres en contra de los hombres, puesto que las mujeres están en una posición en la que buscan ser mejores “hombres” que los hombres mismos. Mujeres así no son de ningún interés para la mayoría de los hombres. A menos que sean unos cobardes que disfruten ser denigrados, devaluados, tenidos de menos.

Pero hablemos de algo más que es sacrificado cuando una mujer toma el equivocado camino de ser feminista. Su salud y su bienestar. Así que, esto es algo que no tiene nada que ver con las relaciones o los hombres.

Lo que he observado en mis muchos años enseñando sobre relaciones tanto a hombres como a mujeres, es que la razón por la que muchas mujeres están quemadas y exhaustas es debido a que usan su “energía masculina” las 24 horas, los 7 días de la semana. Lo cual es totalmente antinatural.

Desde luego, las mujeres tienen que hacer uso de su lado “masculino” para ciertas actividades. Por ejemplo, como cuando cuidan a un niño o a uno de sus padres convalecientes, usan su energía masculina ya que están cuidando, protegiendo, “dando”, lo cual es una actitud masculina.

Cuando las mujeres reciben, de cualquier modo, están empleando su energía femenina. Así que emplear su lado masculino es tan natural para las mujeres como emplear su lado femenino. Pero es desgastante estar en modalidad masculina todo el tiempo.

El lugar de trabajo es masculino. Así que se requiere que las mujeres usen su energía masculina todo el tiempo. El problema es que la mayoría de las mujeres no se da cuenta que deben, o no saben cómo, apagar su energía masculina y encender su energía femenina.

Es que mira, una mujer tiene que darse cuenta de que cuando emplea su energía femenina puede entonces recargar sus baterías, por decirlo así. Así que lo recomendado sería darse un tiempo, en especial cuando vuelve del trabajo, para dedicarle tiempo a sus energías femeninas, del mismo modo en que podría ponerse ropas más cómodas. Si de manera consciente deja en un estante las energías masculinas, o las coloca dentro de una gabeta para luego brindarse algo a sí misma, una copa de vino, meditación, bailar en ropa interior, entonces podrá nutrirse de una manera más femenina y amorosa consigo misma.

También recomiendo esto antes de ir a una cita, o de estar con su esposo, ya que los hombres sienten repulsión por las mujeres que manifiestan energía masculina, ya que básicamente los coloca en modo competitivo para “ver quién es mejor hombre”. Así es como funcionan las cosas en su estado natural. Una mujer sensata no debe de tratar que los hombres actúen de forma diferente ante una mujer que exhibe actitudes masculinas, eso naturalmente no funcionará.

Si alguna vez las mujeres se preguntaron cual es la habilidad más importante para crear una sólida relación amorosa y apasionada, te diré que sin duda alguna es la habilidad para usar el poder que ya tienen, como mujeres, sobre cualquier hombre a quien deseen influenciar.

Y esto es debido a que el ingrediente más importante de cualquier relación exitosa es el poder que está oculto dentro de cada mujer en este preciso instante. Es el Eterno Femenino del cual hablaremos en próximos artículos sobre cómo usarlo.