El siguiente articulo es un testimonio compartido por un lector luego de la publicación en nuestro blog del tema: “Pornografía, Degradacion de la Mujer y Perdida de Valores en los Hombres”.
El artículo de ustedes de la semana pasada me despertó de un largo sueño. Encontré un rimero de videocintas VHS y BetaMax escondidos en el sitio secreto para ocultar cualquier cosa que tenía mi padre allá por 1982 cuando tenía 11 años.
Tenía curiosidad por ver que había en esas videocintas – aunque no teníamos BetaMax.
Cuando puse el primer video en el VHS y presione el botón de “Play” no podía creer lo que veía! Mujeres de verdad enseñando sus genitales de cerca y siendo folladas. Se veían fantásticas y mucho mayores que yo (a lo sumo jovencitas de 18 años en adelante) la visión de estas cintas de video me sobrecogió con excitación sexual. Cosas que jamás había experimentado comenzaron a recorrer mi cuerpo entero y me vine a los pocos minutos. Eso fue todo lo que necesité, me hice adicto a la pornografía!
Con los años, durante mi adolescencia, me las arreglé para salir en una cita con una de las chica de la escuela. No era mal parecida, pero daba unas mamadas a cualquiera que ella pensara que estaba bien y con quien sería divertido salir después de la escuela. Como puedes imaginar, habían bastantes chicos haciendo cola para ser su amigo. Recuerdo que ella no podía creer lo que yo podía hacerle a ella y por esa razon comenzamos a salir como pareja por mucho tiempo. Tan solo le dí lo que había visto a los hombres hacerles a las mujeres en los videos y a ella le gustó mucho.
Desde entonces hasta la mitad de mis 30 años me acosté con tantas mujeres atractivas como me fuera posible para satisfacer mi apetito sexual producto de toda la pornografía que consumía. Era DJ en nightclub y era el lugar perfecto para levantar chicas atractivas quienes estaban dopadas con “éxtasis” y deseosas de tener buen sexo.
Yo podía conocer una chica en el nightclub, llevarla a su casa y luego regresar unas pocas horas después para hacer la misma cosa con una “mujer fresca”. Perdí la cuenta de todas mis compañeras sexuales hace años y es bastante triste darme cuenta que yo realmente – me cuesta admitirlo – todavía estoy atorado dentro de la ilusión de la pornografía. De todas las mujeres con las que me acosté, no creo que pudiera haber llegado a conocer a ninguna de ellas y si ellas mostraban algún interés, salía corriendo.
Todo se trataba de satisfacer el deseo sexual y todo lo que quería de ellas era tener sexo y eso era todo. Las filmaba, me acostaba con dos a la vez y toda clase de deseos de lo más oscuros fueron satisfechos durante mi cúspide de conquistas sexuales. Conocí a mujeres de las más depravadas que puedas imaginar y también conocí a chicas realmente adorables que buscaban una relación a largo plazo; lo siento mucho por esas chicas ahora.
Sin importar cuánto me satisfacieran ellas sexualmente, siempre iba a poner los videos en el VHS para ver una buena dosis de pornografía después de que ellas se iban. Te lo puedes imaginar! Una chica de lo más atractiva me ha dejado que me la folle del modo que quisiera y tan pronto como ella cruzaba la puerta comenzaba a masturbarme ante videos porno, una locura!!
Cuando miras complacido la pornografía no te das cuenta para nada del abuso y miseria existencial que ocurre detrás de las escenas. En lugar de eso tu ves nada más a una jovencita ardiente con sus genitales depilados dándote lo que tu quieres ver precisamente. Estas chicas son de lo más bonitas e incluso aquellos que no son tan agraciadas tienen algo que te excita. No hay manera de componerse de esto cuando marcas en tus favoritos la película porno del momento, unos cuantos días, o incluso horas después ya estás buscando por vaginas frescas. NUNCA puedes curarte de esta cosa. Se queda asentada en tu mente y todo el día satura tu subconciente y te pide que busques más porque es mejor que el sexo real.
Para nada lo es y nunca será mejor que una mujer real, pero al igual que las drogas te atrapa en un lugar del que no puedes salir sin ayuda y bastante fuerza de voluntad. Es seductora y realmente creo que es una maquinación diabólica proveniente del mismo infierno.
Te lo digo yo que he tenido mujeres atractivas en mi cama, noche tras noche y aún así prefería ver pornografía en lugar de tener una relación amorosa real con una mujer de carne y hueso con quien compartir una vida.
Este te podrá sonar alocado pero realmente soy de la opinión de que Satanás tiene el control de esto y través de sus canales promueve este veneno adictivo y destructivo por medio de la élite en el poder, los illuminati. Es la forma perfecta para controlarte y promover una sociedad que mira al matrimonio como algo para gente débil de mente que no tiene cojones. “Sal y ve a follar”, eso es todo lo que ellos quieren que hagas. De ese modo la unidad familiar es destruida y Satanas puede manipular a sus esclavos dentro del mundo perfecto dictatorial al que nos estamos acercando cada hora del día con la ayuda de nuestros llamados “líderes”.
La adicción a la pornografía ha sido un verdadero problema para mi y puedo imaginarme que es verdaderamente un serio problema para millones de jóvenes en el mundo, tanto chicos como chicas, en nuestro mundo moderno. Tengo mi propio negocio aquí en el DF (México), pero muchas veces me levanto temprano para comenzar el trabajo y enciendo la computadora; luego me voy directo a un sitio porno. Bad Jo Jo, Porn Rabbit, cualquiera de esos y más, hoy en día existen miles de esos YouTubes pornos. Antes de que me diera cuenta la mitad del día había pasado y todo lo que había hecho era masturbarme. ¡Vaya manera de conducir un negocio exitoso!
Ahora esto se ha puesto tan malo que cada vez que veo la computadora comienzo a pensar en sexo y algunas veces no puedo esperar para llegar a mi casa para buscar una “dosis” de porno. Tengo una novia (por primera vez en mi vida) quien es muy atractiva con un cuerpo de diosa, pero muy a menudo me voy a la cama después de ella y me masturbaré ante una puta en la pantalla de mi computadora, sin importarme y sin saber que la mujer que se preocupa por mi y que me ama duerme en la habitación de arriba mientras yo estoy haciendo esta mierda.
La única dirección que lleva esto es un seguro curso de auto-destrucción que llegará a explotar haciéndose todavía peor de lo que es ahora. No puedes ir a ningún lado sin tener a la mano tu móvil o internet con algún material relacionado al sexo y si se lo dices alguien los joderá tanto que pensarán que eres un anticuado o friki. No soy ningún hipócrita y nunca crítico a nadie por hacer lo que yo mismo hago; eso sería ser un fariseo de mi parte y me desagrada esa clase de gente.
Todo lo que puedo decir es esto; si te comienza a gustar los videos porno y se te está desarrollando un hábito, deja de hacer eso ahora mismo. En serio, vas a joder tu vida. Emocionalmente no podrás conectar con ninguna chica (bueno, al menos no de forma apropiada) y si la adicción se hace más afuerte jamás perderás el deseo de ver porno cada vez que se presente la oportunidad. Pasarás horas de tu vida jugando con tu pene (o, vagina – para las chicas) y perderás toneladas de tu tiempo viendo la pantalla de tu computadora en busca de esa dosis inalcanzable.
Es deprimente y puede, creo yo, conducir a problemas mentales y seguro a pensamientos suicidas cuando te das cuenta que no puedes conseguir esta fantasía sexual en el mundo real. Puedes tener sexo de primera, tampoco me malinterpretes, pero no es la misma “dosis” como cuando te estás masturbando frente a una persona que no está ahí para ver tu reaccion y que pueda incluso enamorarse de ti y tu de ella.
La pornografía ha arruinado bastante de mis sentimientos por el sexo opuesto y me siento realmente mal por mi novia. A menudo rechazo sus ofertas para tener sexo y en lugar de eso espero, algunas veces toda la noche, para que ella se vaya a la cama a modo de satisfacer mi fantasía sexual frente a la pantalla de mi computadora. No es real pero la atraccion magnética es bastante real y puede alejarte de verdad de tu novia que te ama. Si eres el tipo tímido y tienes miedo de hablarle a las mujeres, a otros hombres, o no vives o trabajas en una zona donde puedes conocer a alguien resulta peligroso depositar tus emociones en esta mierda.
De todos modos, tenía que escribirles esto y espero que pueda evitar que alguien más siga el mismo camino que inicié allá en 1982. Todavía sigo en ese camino y me encantaría encontrar una salida, pero hasta ahora el camino esta entre una barrera de bellas mujeres sensuales que me darán continuo placer sexual. Lo que me parece que no puedo hacer es tan solo bajar la marcha y darme cuenta que la salida ha estado ahí todo el tiempo si de verdad tengo la fuerza de voluntad de buscarla.
La pornografía de verdad te cegará del verdadero significado del sexo. Se suponía que era un regalo de Dios para unir a dos personas de modo que se convirtieran en una sola caner y disfrutaran no solo del sexo, si no también de todas las cosas maravillosas que ese compañerismo te brinda, el amor, la lealtad, una familia y otras cosas importantes. La pornografía tiene que irse o de lo contrario nadie podrá tener la oportunidad de tener una relación feliz y duradera.