La conversación es un arte perdido para muchos hombres y es realmente malo porque un hombre que sea buen conversador tiene mucho éxito con las mujeres.
“No hay conversación que no valga la pena, siempre y cuando sepas qué escuchar. Y las preguntas son el soplo de la vida para una conversación”. – James Nathan Miller
Por Marta B.
La conversación es un arte perdido para muchos hombres y es realmente malo porque un hombre que sea buen conversador tiene mucho éxito con las mujeres. Por qué? Porque mi querido amigo, como ya lo he dicho antes, las mujeres se encienden con lo que oyen.
Ahora hay ciertamente toda clase de hombres creen que son grandes conversadores (tanto así que apenas y puedes callarlos), pero la prueba de que tan buen conversador eres es el rechazo o no de las mujeres. Si las mujeres esperan con ansias tus llamadas, tus correos y tus salidas con ellas es porque eres buen conversador. Si las mujeres brillan cuando entras en escena, si tienes la habilidad para iniciar una conversación con una extraña en la calle (o en un bar, o en la cola del banco) y ella responde alegremente y siente que te ha conocido de toda la vida, si sales con su número de teléfono en tu mano si se lo pediste (y resulta que esta soltera) entonces eres buenísimo para conversar con las mujeres.
Si estas cositas no están pasando. Entonces no eres bueno para conversar, es así de sencillo.
Así que, en qué estas quedándote atrás? Creo que hay al menos tres categorías principales:
Hombres que son demasiado tímidos para hablar a menos que la mujer hable primero o sean presentados por alguna amistad.
Hombres que han llegado a pensar que su éxito es la razón por la que los demás tienen que conocerlos. Aunque creen que están buscando conocer mujeres, están tan desconectados de la realidad, del aquí y del ahora, que lo que realmente están buscando es quién los oiga.
Hombres que saben tener conversaciones cortas y coquetear pero que no dominan una conversación completa con una mujer por la que se sienten atraídos y terminan aburriendo a la pobre mujer a muerte.
Aunque no es de preocuparse, todos los hombres que caen en cada una de las categorías arriba mencionadas son salvables si recuerdan una tan sola regla muy importante – Haz a los demás, lo que tu quieres que los demás te hagan a ti – Sí, si lo sé me estoy poniendo biblíca aquí con la “regla de oro”, no porque quiera hablarte de religión, sino porque esta es una de las herramientas más prácticas conocidas para crear mejores relaciones.
Así que ahondemos en el asunto. Si no estás teniendo actualmente éxito al conversar con las mujeres, si eres uno de los ejemplos mencionados arriba o una combinación de los tres, puedes comenzar tu camino hacia fabulosas conversaciones tan solo con sacarte de la cabeza tu ego y ponerte en el lugar de la mujer con la que te gustaría hablar. Nunca subestimes el poder de la regla de oro; es el comienzo para tu éxito con las mujeres.
Así que vamos a lo específico de cada uno de los tres ejemplos anteriores de hombres que no están dando ni una en el departamento de la conversación:
Hombres que tienen miedo de hablar primero
Si este eres tu tienes que darte cuenta que no eres la única persona tímida en el mundo. Casi todos en el planeta somos tímida de alguna u otra forma. La increíblemente bella y sensual actriz Kim Basinger lucha contra la timidez constantemente y fue alguna vez agorafóbica que no salía de su casa en seis meses. La timidez puede joder tu vida si lo permites – pero uno de los pasos más grandes que puedes tomar hacia perderla es entender que hablar con extraños es incómodo para casi cualquiera. Tan solo hay una manera para sobreponerte y hacer que las cosas pasen – anda y sonríele a ese adorable bebé, di “hola” a esa mujer atractiva en la calle. Comienza de a poco y trabaja en mejorar siempre recordando que tu no eres el único que se siente raro de hacerlo.
Los hombres que creen que su éxito es la razón para que los demás los conozcan
Tener confianza en sí mismo es una gran cosa, presumir es otra y aburre. Siempre me parece fascinante que muchos hombres se pasen quejando que las mujeres solamente están interesadas en los hombres que son exitosos y luego se dan cuenta que su única conversación es acerca del carro que manejan, su más reciente vacación, cuántas casas poseen, etc… Aburrido!
Aquí te doy otra razón de peso por la que presumir no funciona con las mujeres – no cualquiera está en tus zapatos. Las mujeres aún no ganan igual que los hombres y hay toda clase de mujeres bellas e interesantes que apenas van pasando mes a mes con las cuentas. Si tu hablas (en internet, o en persona) sobre tu éxito te pones tu mismo en una situación negativa que tiene dos caras:
Si la mujer es del tipo de aquellas interesadas en los hombres solo por su dinero, entonces ella te está viendo desde ya con un gran signo de $ dólar.
Si la mujer esta fuera de tu liga, financieramente hablando, entonces es posible que le disguste, pierda el interés y se aburra con tus pláticas acerca de tus juguetes y tu buena vida.
Si realmente te va bien en la vida porque has trabajado para ello, pues mis felicitaciones – pero date cuenta que el éxito en lo que te dedicas no se traduce en éxito con las mujeres. Si las mujeres no están haciendo cola para salir contigo, o si tu solo atraes a las busca-fortunas, tienes que verte al espejo y reconocer que estás ahuyentando a las mujeres honestas y buenas con tu mentalidad que ellas solamente quieren ser tu público para escuchar acerca de tu historia de éxito. Trata a las mujeres con interés y respeto del modo que tu quieres ser tratado. Te sorprenderá sobre lo bien que funciona esto.
El hablador compulsivo
Es muy difícil no hablar mucho cuando conoces a alguien que te gusta y por quien te sientes locamente atraído también – pero tienes que hacerlo o te arriesgas a ahuyentarlas gritando como locas porque no las dejaste hablar a ellas y permitirte conocerlas.
Lo que los hombres tienen que recordar siempre es que la mayoría de las mujeres han sido educadas para ser educadas oyentes, así que si una mujer parecer estar realmente interesada en la historia de tu vida, si has acaparado la conversación ella esta meramente siendo cortés y no puede esperar a que se acabe la cita contigo de una buena vez por todas.
Una buena converesación es como una partida de ping-pong o juego de tenis, la conversación deber ir y venir, si la pelota se queda en un solo lado de la cancha entonces no hay juego. Cuando tu descubres que has estado acaparando el tiempo al aire, deténte ahí mismo, ríete un poquito y di algo como “vaya aquí estoy hablando y hablando … cuando lo que realmente quiero es conocer más de ti”.
Contar la historia de tu vida no es ningún logro
Los buenos conversadores demuestran que están verdaderamente interesados en la persona con la que están hablando al escuchar bien y hacer preguntas interligentes – pero tienen el cuidado de no parecer como entrevistadores.
Recuerda esto, la forma en que te comportes hacia una mujer habla a todo volumen sin que digas una sola palabra.